Prevención de Adicciones (1ra. Parte)

Una de las tareas más difíciles con la que tenemos que lidiar en nuestras vidas es las relaciones. De una u otra forma todos estamos en algún tipo de relación.  Cada vez que hablo de las relaciones una de las preguntas más frecuentes es ¿Cuál es la base de una buena relación?. La mayoría de la gente contesta la comunicación, pero ¿Qué es comunicación? El traspaso de información de un emisor a un receptor, la capacidad que tienen 2 o mas personas para interactuar. Muchos dicen yo tengo una buena comunicación con mi hija, con mi esposa, yo les hablo de lo que hice en el día, les comento les doy un besito  y los acuesto. Aparentemente funciona.
La base de la buena comunicación no empieza en la cantidad de cosas que yo tengo que decir, la buena comunicación no empieza en la capacidad que yo tenga para dar un discurso, es algo más profundo. La característica número uno para que haya una buena comunicación es  la capacidad para escuchar. Cuantas veces hemos sentido, después de hablar y hablar, que a  la otra persona, por un lado le entra y por el otro lado le sale. Cuantas veces nos hemos sentido frustrados, han querido conversar algo con el esposo y el cuerpo está ahí pero la mente está en el juego de pelota, en el trabajo, etc.

 

¿Alguna vez ustedes han experimentado lo delicioso que es sentirse escuchado? Cada vez que estén interactuando con el hijo o con el esposo, o con cualquier persona miren para adentro. Cada vez que conversemos con alguien preguntémonos, me sentí escuchado, basado en la respuesta que vamos a encontrar en nuestros corazones, no en la cabeza, podemos tomar una decisión y respondernos a nosotros mismos. En el momento que no nos sentimos escuchados, por favor aprendamos a ser asertivos no recurramos a la pasivo agresividad sino a la asertividad, y expresemos de inmediato lo que estamos sintiendo.

 

La comunicación que nosotros tengamos con nuestros hijos en los primeros años es crucial porque el muchacho desde la niñez comienza un proceso de aprendizaje largo fuerte y consistente. Si no hay consistencia en la casa, en las relaciones , en la comunicación, en los límites es exactamente lo que nosotros vamos a estar enseñando. Recuerden que los muchachos son producto de lo que son los padres, los niños aprenden más viendo que escuchando . Si el niño ve que en la casa hay respeto hay comunicación hay buen trato es lo que el va a aprender. Pero si el niño ve agresividad, golpes, maltrato físico o verbal, eso es lo que va  a aprender. Eso es lo que estamos dejándole de herencia porque muchos de nosotros nos enfocamos en trabajar  10-12 horas al día para construir una gran cantidad de cosas materiales que es lo que le quiero dejar a mis hijos,  pero a nivel emocional qué es le estamos dejando? Estamos en realidad criando buenos ciudadanos, personas de bien, personas que se valoren y  personas que se respeten? porque esa es una de las mejores y más productivas herencias que podemos dejar a nuestros hijos la educación, la disciplina, la estructura. Son valores, son principios que no solamente les van a servir en la niñez sino cuando sean jóvenes, cuando sean adultos.

 

Ser buen papá o buena mamá significa no caerle bien a nuestros hijos . En el momento que les decimos que no y nos mantenemos ¿qué es lo que va  hacer el muchachito? va a gritar va a patalear va a decir que eres un papá o una mamá malo,  va a tratar de vender culpa o va a tratar de manipular la situación y entonces muchos de nosotros los padres que no tenemos una estructura o una fortaleza emocional fuerte vamos a ceder. Invevitablemente si nosotros queremos educar bien, si queremos amar bien a nuestros hijos no les vamos a caer bien. Ahora si nosotros estamos enfocados solamente en ganarnos el cariño, ganarnos el amor, la aprobación el reconocimiento de ellos, déjenme darles malas noticias: 95 % de los pacientes que tenemos en el Hospital en este momento y a través de los casi 20 años que yo tengo trabajando ahí son muchachos de padres que no han tenido autoridad, que no han tenido límites, que no han tenido estructura, y que les han permitido hacer lo que les da absolutamente la gana. Es muy triste ver que son los muchachos los que deciden donde la familia va a las vacaciones o dónde van a ir  a comer el domingo. ¿Dónde estamos los padres?

 

Lamentablemente nosotros como padres hemos perdido autoridad ¿Qué es lo quiere decir autoridad? Lo primero que nos viene a la mente es régimen , fuerte sólido y no tiene nada que ver con eso. Autoridad quiere decir ayudar a crecer. Cuando yo tengo autoridad y no tengo miedo a que mis hijos se enojen, a que mis hijos no me dejen de hablar, a que me griten que soy malo, e inclusive que me griten que me odian, créanme que le estoy haciendo un bien.   Por un par de años nosotros seremos los villanos pero más adelante ustedes van a cosechar el fruto de lo que están sembrando hoy en día. Si nosotros creamos niños malcriados, niños deshonestos, niños que hacen lo que quieren, más adelante somos nosotros los que vamos a pagar las consecuencias. Igualmente si nosotros desde ahora cuando están pequeños tenemos la habilidad, el coraje y la consistencia para tener límites ellos lo van a agradecer. Pasarán años, pero en algún momento llega esa madurez y va a decir ¡Gracias papá! ¡Gracias mamá!

 

Uno de los problemas más grandes que tienen los muchachos hoy en día es que el 80% de ellos tienen demasiadas cosas y no saben ser agradecidos. Creen que se lo merecen simplemente por el hecho de ser porque yo soy Pedro Pérez me merezco el cielo y las estrellas. Como dicen, “yo no pedí venir, yo no pedí nacer, ya que me trajiste entonces me debes” y lo más triste que nosotros, muchos de nosotros, como padres compramos eso.
Un momento de reflexión el momento en que escuchamos al joven, niño,  adolescente que está en ese proceso de manipulación frenemos, no le frenemos al niño él está actuando en base a lo que nosotros mismos le enseñamos sino tomemos un momento de reflexión para mirar para adentro y decir qué es lo que yo estoy haciendo, en qué es lo que yo me he equivocado. No somos perfectos, nos vamos a equivocar.  Como dicen por ahí Los hijos no vienen con un manual, de cierta forma sí vienen con un manual el manual con el que a nosotros nos criaron, ese es el manual que nosotros tenemos. Dice una oración  muy interesante que “Somos la última generación que teníamos miedo a nuestros padres y somos la primera que tenemos miedo a nuestros hijos “ De dónde viene hoy en día ese miedo que tenemos de poner límites a nuestros hijos?
Importante la consistencia que vamos a tener a la hora de ponerles límites, los límites es algo que les va a enseñar no solamente en el presente sino en el futuro porque mientras ellos tengan una estructura se van a regir van a ser unos muchachos fuertes, unos muchachos que sepan valorar todas las cosas que tienen Van a entender el concepto de ganar privilegios.

 

Es nuestra responsabilidad es nuestro trabajo guiarlos educarlos. NO va a ser fácil, pero créanme que vale la pena

 

Nota: Charla impartida en el Colegio Lux Mundi, el 1 de noviembre del 2011