Durante los días de ambientación, previo al inicio del año escolar, estuvimos reflexionando sobre la parábola del Sembrador, aquella que nos narra Jesús que salió a sembrar, y dependiendo del terreno donde cayó la semilla, fue pisoteada, se secó, se ahogó y sólo la que cayó en buena tierra dio frutos.
Todos deseamos y esperamos los mejores frutos en este año escolar ¿Cómo entonces podemos ayudar a nuestros hijos a ser buena tierra?
Queremos compartir algunas ideas prácticas que nos pueden orientar en esta tarea como comunidad educativa. Están extraídas de un artículo publicado en un diario local sobre cómo educar bien y llegar al objetivo perseguido en todo proceso educativo de formar seres libres, seguros de sí mismos y con capacidad de compromiso. Son cualidades necesarias para que caminemos hacia una sociedad más sana, justa y desarrollada.
El profesor Federico G. Pardo, después de 36 años dedicado a educar, publicó las siguientes recomendaciones sobre el significado de educar bien:
Educar en la Cultura del Esfuerzo. Permitamos y promovamos que nuestros hijos consigan sus metas con su propio esfuerzo, no hagamos por ellos lo que puedan hacer por sí mismos, tanto en la responsabilidad del hogar como las de la escuela. El primer día de clases de sus hijos hicieron una dinámica en el aula expresando sus metas para el año escolar, anímese a compartirlas con ellos y a entusiasmarlos para que las logren.
Fomentar la Lectura. Si no se lee, no se piensa y si no se piensa, no se interiorizan valores. Uno de nuestros quehaceres como comunidad educativa es formar en el hábito de lectura. Si los padres modelan este buen hábito en el hogar y analizan con sus hijos lo que están leyendo, podemos lograr ser ciudadanos más críticos con las informaciones que recibimos y fortalecer los principios y valores familiares, morales, religiosos, patrios.
Fomentar la Voluntad. Es lo mismo que educar en el orden, la disciplina y la constancia. Ayudar a establecer prioridades en el día a día, en el buen uso del tiempo, la puntualidad, la lucha en vencerse a sí mismo, cuando las emociones desean tomar el primer lugar y tener objetivos claros, entre otras cosas, fomentan el fortalecimiento de la voluntad. Cuando tenemos un gran por qué, somos capaces de perseverar con determinación.
Este año escolar 2012-2013, la Comunidad Educativa Lux Mundi renueva su compromiso de ser mejores hoy que ayer. Nuestro lema es dar lo mejor de nosotros mismos cada día. Este es el mensaje y el reto a que invitamos en medio de las dificultades propias del momento histórico en que vivimos. Nos sostiene la Fe en que juntos padres, maestros y alumnos podemos abonar la tierra y la Esperanza de que la semilla germinará y a su tiempo dará sus frutos. ¡Buen Año Escolar para todos!
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